Los Efectos Superficiales sobre el índigo: Parte I

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Por Mirko R. Costa / Instituto Químico de Lima

Introducción: En la década de los años de mil novecientos setenta, se dio en los EE.UU., un fenómeno social común a todas las sociedades mundiales pero de características únicas en el caso americano. Atraídos por los mejores salarios pagados en las metrópolis, los “campesinos” que emigraron a las ciudades, quizás en su nostalgia por su terruño o tal vez por la carencia de prendas de vestir, hicieron que los “emigrantes campesinos” usaran el “blue jean” en las ciudades. Por imitación y, además, por la identificación con el ícono tradicional del vaquero de los pueblos sureños, promocionado por las estrellas cinematográficas hollywoodenses, los citadinos adoptaran al “blue jean” como la vestimenta de recreo de los fines de semana.

La mejor manera de diferenciar entre lo real y la imitación, esto es, entre el usuario ocasional y el usuario original, el campesino nato y el usuario citadino que lo vestía por imitación; entre el que había visto al vaquero y el que sólo lo conocía a través de las películas, era por la antigüedad del “blue jean”, determinada por su desgaste. La mayoría de los efectos de desgaste superficial son fruto de los desarrollos motivados por la obcecada intención de perpetuar la vida de los pantalones vaqueros tintados con índigo.

Pero, ¿a qué se debe la permanencia del índigo en el mercado mundial a pesar de todas sus reconocidas debilidades?

Sorprendentemente se debe a sus mismas debilidades, es decir, a su moderada solidez general al lavado, luz y frote y a su forma de tintura en hilo, pero sobre todo al “marketing” para su venta.

Desgaste del Denim

Podemos decir que la atracción actual del índigo se debe a los efectos que aparecen sobre la superficie de las prendas resaltando su decoloración zonal debida en parte a su baja solidez y en parte a su tintura anular obra de su baja penetración a la fibra.

Esta decoloración es debida al movimiento de los hilos que permite a las fibras blancas no teñidas emerger de su interior y las azules teñidas con índigo sumergirse en el interior, hecho que conocemos como “efecto chispa”, debida a la decoloración del colorante y al blanqueo de las fibras no teñidas por acción de agentes oxidantes.

Retomando el objetivo de nuestro tema, el tratamiento de las prendas, éstas, tras un período de uso, desarrollan en las costuras y en zonas con impedimento para el movimiento de los hilos, diferentes grados de revolución de las fibras que se visualizan como variaciones en la profundidad o en la intensidad del color, especialmente notorias en las prendas de algodón teñido con índigo en la urdimbre, además de su decoloración general y aumento en su brillo.

Este aspecto característico de envejecimiento, llamado también, en el caso de los tejidos de mezclilla de índigo, “uso y abuso”, “sal y pimienta” o simplemente “contraste”, se ha convertido en algo muy deseado por una parte considerable de los usuarios en los últimos años.

Con la finalidad de otorgar un carácter técnico y didáctico al tema clasificaremos las técnicas que se emplean para conseguir este efecto, ya sea la revolución de las fibras del hilo con el manipuleo y trajinar de la prenda o aquellas debidas a la decoloración del colorante índigo en la prenda, en físicas, químicas y bioquímicas que serán tema de otras publicaciones.

Los procedimientos físicos

La decoloración física se inició con lavados fuertes, también llamados industriales a los que, posteriormente, se incorporó piedras pómez que aparte de acentuar y acelerar el desgaste, dañaban la prenda al magnificar el deterioro de las partes débiles de los hilos ocasionando huecos.

Las piedras pómez usadas para acelerar el proceso de desgaste tenían un tamaño que variaba entre 2.54 cm y 25.4 cm (1 a 10 pulgadas) cuyo deterioro formaban partículas más pequeñas por la naturaleza abrasiva del proceso, normalmente el período de tiempo suficiente para que el tejido sufra la abrasión pétrea requerida. Además, el golpe de la piedra pómez suavizaba el tejido y producía una decoloración de la superficie similar a la lograda con el uso prolongado de la prenda. Las partículas de piedra pómez en las prendas, resultado de la molienda que sufren en el proceso, deben ser eliminadas de forma manual dado que tienden a acumularse y pueden provocar sobrecarga a los motores eléctricos, daños mecánicos en los cojinetes de rotación de las paletas y en los tambores de agitación, además de obstruir los conductos de drenaje de la lavadora y hasta atorar los desagües de la red de alcantarillado.

Piedra pómez

Posteriormente, con la finalidad de amenguar el deterioro físico a la prenda ocasionado por las piedras pómez, se emplearon pelotas de jebe, cubos de madera cubiertos con lija, botellas de policarbonato y, últimamente, corontas secas de maíz para provocar la abrasión y en el caso del envejecimiento químico, albergar al agente oxidante.

Posteriormente, se prestó de la industria de la pintura el “arenado por chorro de aire”, manual e industrial, conocido como “Sand Blast” en inglés. Un proceso de decoloración física con material abrasivo seco, lanzado a presión para lijar la superficie del tejido con la finalidad de desgastarla, o mejorar la adherencia de los recubrimientos.

Las “máquinas arenadoras” industriales emplean abrasivos comunes para la industria de la pintura como: i) arena silícea, ii) granalla de acero, iii) óxido de aluminio iv) micro esferas de cristal que permiten un desgastado localizado y/o en un determinado dibujo.

El proceso se basa en el hecho que las zonas expuestas al chorro abrasivo exhiben una mayor decoloración cuando comparadas con las zonas no expuestas de la prenda, simulando un aspecto de mayor envejecimiento. Las áreas comúnmente expuestas al lijado son las áreas de las caderas y muslos en el caso de los pantalones; las áreas de codos, cuellos y hombros en las chaquetas; y el frente y las caderas en las faldas.

Se practican diferentes grados de abrasión según lo solicitado por el cliente y/o la especificación requerida; así, se conocen, de mayor a menor: i) grado metal blanco, ii) grado metal casi blanco, iii) grado metal comercial y iv) grado ráfaga según la intensidad del efecto.

Grados de abrasión

Con la finalidad de focalizar el efecto en los pantalones se emplean piernas artificiales inflables que facilitan el acercamiento de la prenda con la arenadora. Muchas veces se pone un molde entre la prenda y la pierna inflable para acercar más el área de la prenda sobre el molde con respecto a los alrrededores y acentuar el efecto de abrasión.

Aparato de piernas inflables para acercar la prenda a la zona de abrasión

Detalle del bolsillo izquierdo logrado al acercar el molde a la superficie abrasiva

Otras veces se usa una plantilla con un diseño que permite lijar ciertas áreas y proteger los alrededores siguiendo un dibujo; el área lijada, posteriormente, se puede contrastar con un teñido para hacerlo más notorio.

Dibujos arenados con ayuda de una plantilla

Los equipos más comunes usados con esta finalidad son manuales pero existen otros completamente automatizados o robotizados, que facilitan el trabajo en serie y garantizan la uniformidad e intensidad el efecto en todas las prendas procesadas.

Inicialmente, este efecto se limitaba únicamente al arenado pero hoy podemos incluir dentro de este concepto, los desgastes por esmerilado localizado con diferentes tipos de cabezas de esmeriles, que marcan ciertos quiebres intencionales en la prenda, formando figuras en la parte superior delantera de la prenda o trasera de la rodilla. Según su dirección estos novedosos efectos reciben diferentes nombres, así, “Bigotes de Gato” (whiskers/cañones) cuando son horizontales, “Galones” o “Chevrons’’ en inglés cuando son verticales y “Muescas” o “Nicks” en inglés a la imitación de quiebres por planchado en cualquier dirección. Pueden ser realizados con bigoteras, lija suelta, nebulizadores con permanganato, pigmento o tizas.

Bigotes de gato (Whiskers/cañones)

Wiskers (Bigotes)

Chevrons (galones)

De la misma forma que los bigotes se realizan desgastes localizados a lo largo de la entre pierna de la prenda o en los laterales, buscando simular los quiebres o desgaste naturales que sufre la prenda con el movimiento.

Abrasión por esmerilado manual

 

Abrasión: desgaste continúo en los bordes de los bolsillos delanteros y traseros, pretinas y boca pie o bastas de las piernas, se pueden realizar al principio, en el intermedio o al final del proceso húmedo.

Abrasión por esmerilado manual

Abrasión por esmerilado manual

Nicks (muescas): desgaste intermitente o pequeños piques realizados en bolsillos, bocapie y bolsillos traseros mediante el roce de la prenda con un esmeril punteagudo.También un desgaste en forma de raya o línea delgada realizado en los paneles u otras zonas de la prenda con el mismo artefacto.

Huecos

Holes (en inglés) o huecos: desgastes hechos a lo largo de la prenda con la finalidad de destruir la urdimbre y preservar la trama de la tela. Se pueden realizar con esmeril, bisturí y laser.

PLASTIFLECHAS

Tacking: consiste en sujetar pequeñas porciones de la tela en una zona específica de la prenda mediante el uso de flechas plásticas para de esa manera obtener un efecto de tono más oscuro en la zona de aplicación. Se realiza al pricipio o intermedio del proceso húmedo.

Enmallado

Enmallado: Proceso manual en el cual la prenda, cuando está cruda, es sometida a un enmallado o amarrado parcial o total con zunchos, mallas o pitas con el objeto de inmovilizarla y obtener un agrietado o quiebres aleatorios, y zonas de diferente tonalidad.

Efectos en lavandería

A continuación se dan a conocer los nombres con los que se conocen estos efectos en nuestro medio con la intención de homogenizar la terminología.

 SAND BLASTING FÍSICO: proceso de desgate físico que se realiza por medio de chorros de arena abrasiva a presión aplicados sobre las prendas de índigo buscando efectos de envejecimiento.

LIJADO O HAND BLASTING: proceso de desgaste físico manual que se aplica a la prenda cruda; la aplicación puede ser total, parcial e irregular. Sobre el lijado se pueden hacer realces con colorantes o pigmentos por medio de esponja para lograr efecto contrastantes.

STONE WASH: Proceso de envejecimiento de las prendas ya sea por abrasión de la piedra pómez sin o conjuntamente con enzimas tipo celulosas (sean estas ácidas o neutras) para amenguar la drasticidad del tratamiento. Se caracteriza por resaltar las costuras, desgastar los bordes y decolorar el tono o remover el colorante de la superficie de la prenda.

SAND WASH o Lavado con Arena: el proceso emplea piedra pómez molida o tierras diatomáceas (arenas) para lograr efectos más parejos al evitar el golpe puntual de la piedra.

STONE LESS: lavado con enzimas en ausencia de piedras; el aspecto de la prenda sometida a este lavado bioquímico es similar al Stone Wash pero con la ventaja de no presentar desgate en bordes, ni costuras; a la vez que se logran los efectos superficiales fuertes tradicionales sin deterioro excesivo de la prenda.

DESENGOMADO O PRELAVADO EN PRENDA: eliminación de las gomas o encolantes aplicadas a los hilos de la urdimbre en el proceso de tejeduría con la finalidad de flexibilizar la prenda y facilitar los procesos posteriores. Las gomas a eliminar pueden ser: solubles en agua, como la C.M.C., semi solubles como el alcohol polivinílico e insolubles, como el almidón. En el caso del almidón se emplea enzimas del tipo amilasa.

INDUSTRIAL WASH o Lavado Industrial: Proceso de desengomado con piedra pómez y un fijador del colorante índigo con miras a conservar el tono oscuro. La abrasión da un efecto más contrastante y un suavizando final a la prenda.

 RAIN WASH/ACID WASH/FROSTED: Procesos químicos en seco que consisten en remojar la piedra pómez seca en una solución de hipoclorito de sodio o permanganato de potasio para provocar un desgaste irregular en las zonas de impacto de la piedra. Se necesita neutralizar el proceso.

OCEAN MAGIC: Proceso similar al anterior pero que emplea un producto abrasivo más ligero (arena). Se utiliza especialmente para prendas livianas y delicadas (tejido de punto u otros). Se necesita neutralizar el proceso. 

PLASTIFLECHADO: Proceso que consiste en colocar flechas plásticas en diferentes sitios y de manera irregular, para conseguir un arrugado grueso o fino que luego, como resultado de la abrasión, dejan ciertos contrastes entre oscuro y claro.

CRAQUELADO: Consiste en amarrar la prenda antes de iniciar un proceso en húmedo, logrando efectos de arrugas totales o parciales regulares e irregulares. Se trata de un enmallado parcial de la prenda.